La Organización Mundial de la Salud (OMS) le solicitó a investigadores y gobiernos expandir la investigación sobre patógenos que podrían evolucionar y causar futuras pandemias.
Entre estos patógenos se encuentran los responsables de enfermedades como la gripe, el Covid-19 y la tuberculosis, además de otros. Esta recomendación cuenta con el respaldo de la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI), una organización público-privada de la que forma parte la Fundación Bill y Melinda Gates y gobiernos como el de Alemania, Japón, Noruega, entre otros, que tiene como objetivo financiar proyectos de investigación independientes para desarrollar vacunas contra enfermedades infecciosas emergentes.
En un comunicado de prensa, la OMS precisó que junto a la CEPI “han subrayado la importancia de ampliar la investigación para englobar familias enteras de patógenos que pueden infectar a los seres humanos —independientemente de su presunto riesgo pandémico— y de centrarse en patógenos concretos”.
“Con este método se propone utilizar prototipos de patógenos como guías o precursores para establecer la base de conocimientos de familias enteras de patógenos”, detallaron en la publicación. Y ampliaron: “Con esta estrategia se pretende también acelerar la vigilancia y la investigación con el fin de comprender la transmisión de los patógenos, cómo infectan a los seres humanos y cómo responde a ellos el sistema inmunitario”.
Estos postulados forman parte de un informe presentado por la OMS durante la Cumbre Mundial de Preparación para Pandemias celebrada esta semana en Brasil. “Necesitamos que la ciencia y la determinación política se unan mientras nos preparamos para la próxima pandemia”, declaró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Tedros enfatizó la importancia de superar estos desafíos: “Profundizar nuestros conocimientos sobre los muchos patógenos que nos rodean es un proyecto de ámbito mundial que requiere la participación de científicos de todos los países”.